¿Y SI EDUCAMOS?

¿Y SI EDUCAMOS?
Igualdad, justicia social, cero discriminación, derechos humanos, valores, educación... Ahora estudiando el Máster de Educación y Comunicación en Red para conocer nuevos procesos en el Sistema Educativo.

miércoles, 3 de mayo de 2017

APPLE Y SU GRAN MANSIÓN.

Entro por la puerta, bueno puerta, puerta, no. Entro por una apertura grande, bastante grande, como si me dispusiese a entrar en un palacio. Una vez dentro veo a unos 15 trabajadores y trabajadoras de verde. Hago una cola de 30 segundos y me hacen sentarme en un taburete alto junto a una barra más larga que la cocina y habitación de mi casa. Me siento. Observo y calculo más o menos que donde estoy es seis, siete u ocho veces más grande que el salón de mi casa.

Sigo observando y llego a la conclusión de que no cobrarán mucho, lo justo para no quejarse y tener una tecnología actual y moderna que les hará callarse. Sigo en la barra y me falta que me den un masaje y me sirvan mientras tanto un café. Me atienden estupendamente, le digo que el teléfono que quiero arreglar no es mío y cuando tiene un momento se dispone a venderme uno. Le hago entender que odio las tecnologías y más el transfondo de esta empresa sobre todo la fabricación de estos. Me sigue intentando convencer y le hago entender una vez más que nunca he pagado por un teléfono y que los que he tenido y tengo me los ha regalado la compañía con la que estoy o son antiguos de mi casa. Finalmente se calla educadamente. Sigo sentada y llego a una nueva conclusión ya se porque odio Apple, ahora después os lo cuento. Mientras tanto pienso porque la gente odia tanto Apple o porque se le critica tanto. Es una gran contradicción. Vas en el transporte público y la gente lleva iPhones como si se tratase de llevar una botella de agua y en la tienda no para de entrar y salir gente. La gente odia Apple pero aun así lo tienen. Por eso puedo decir VIVA LA HIPOCRESÍA. Odio Apple por la simple razón de que fomenta el consumismo, de que hay otras marcas mucho más baratas que tienen un gran software y hardware pero eso da igual, la gente prefiere comprar la manzana e ir a la última. Me encanta. Me encanta la gran hipocresía en la que vivimos, me repito una vez más.

No he generalizo, no es mi intención porque comprendo que cada unx compra lo que quiere y hasta donde puede su monedero, pero…. ¿es necesario seguir fomentando el consumismo de esta empresa (Apple) que vulnera tanto los derechos humanos en su proceso de fabricación?


Os dejo unos artículos de información que hay veces que son necesarios.
La doble cara de la moneda: Apple y los derechos humanos.

¿Hay trabajo infantil detrás de los dispositivos Apple? Amnistía Internacional.


Una vez más, yo misma, Hortensia Martínez-Quintanilla Palao. 

 La semana que viene más y mejor.

¡Un abrazo apretado!

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